Para Yosra Frawes, la igualdad no es sólo una preocupación a la que se ha dedicado desde su más temprana juventud, sino más bien un concepto integral, una visión, un objetivo y una consigna para la acción: Conditio sine qua non para el bienestar de cualquier sociedad. Un encuentro con la abogada y activista, la poeta y una mujer del mundo.
Comentarios preliminares
Cuando me pidieron que escribiera un retrato periodístico de Yosra Frawes, dudé durante mucho tiempo.
¿Cómo describir a Yosra, cómo informar sobre ella?
Una muestra de escritura, un ensayo que no puede ser más que subjetivo.
Prepárense para ello: Les presentaré a Yosra Frawes, la mujer, la poeta, la abogada y la activista por los derechos de las mujeres.
No es excesivamente difícil encontrar rastros de Yosra en Internet.
No es ajena a Google y Wikipedia.
Su perfil de Facebook era de libre acceso para todos los usuarios de Internet hasta hace poco.
Twitter e Instagram no son lo suyo.
Su número de teléfono está disponible abiertamente, los periodistas e interlocutores pueden ponerse en contacto con ella en cualquier momento.
Con su sonrisa ganadora, su carisma y su voz profunda, reúne un círculo casi interminable de amigos y espíritus afines a su alrededor.
La periodista tunecina y defensora de los derechos humanos Souhayr Belhassen, ex presidenta y actual presidenta de honor de la Fédération Internationale des Droits Humains (FIDH), dice de ella: "¡Yosra es el orgullo de todos nosotros! Ella encarna la continuación de nuestra lucha por los derechos humanos y especialmente por los derechos de las mujeres en Túnez y más allá de sus fronteras... con su amplia formación adquirida en el ámbito cultural árabe y francófono y su carisma, se convirtió en portavoz de la causa de los derechos humanos. Ha tenido una influencia decisiva en el compromiso de los jóvenes. Yosra Frawes es una persona de gran integridad personal y capacidad diplomática que sabe defender sus convicciones y puntos de vista. Esto la convierte en una figura clave para los derechos humanos y los derechos de la mujer en particular hoy en día".
El retrato
Para llegar a su interior, para sentir su esencia, hay que "arrancarla" literalmente de su trabajo y compromiso diario como activista. Era ella quien había elegido el lugar para nuestra conversación. Como era de esperarse, en este día de otoño, la ciudad de Túnez muestra su mejor cara bañada por la brillante luz del sol.
Me había invitado a venir a "Cebalet Ben Ammar", a pocos kilómetros de Túnez, donde la belleza del paisaje casi nos deja sin aliento. En una de las granjas de allí, nos sentamos juntos en medio del gran patio. Al fondo, unos cuantos caballos deambulan por el pasto de un prado. El propietario ha convertido la casa en un refugio para los que quieren escapar del ruido de la capital.
Antes de abrir el laptop al comienzo de la entrevista, me pide que respire profundamente el aire del campo, "¿no es inspirador?", añade, levantando las manos al cielo como si se preparara para recitar uno de sus poemas o un discurso.
Cuando habla, suele estirar la mano o las dos manos hacia el cielo, hacia el público o hacia su interlocutor, no sólo para recibir energía positiva, sino también y sobre todo para dar libertad a sus sentimientos, de los que se deja llevar en cada una de sus apariciones públicas.
La igualdad: Todavía queda mucho por hacer
En la escuela, todavía no entiende por qué la cuestión de la igualdad de las mujeres le preocupa tanto. Sin embargo, recuerda muy bien el día en que, ya entonces, exclamó en voz alta y audible: "Las mujeres tienen pleno derecho a trabajar. Como los hombres". En el patio de la escuela, estaban juntos en un grupo cuando un compañero declaró que estaba en contra de que las mujeres trabajaran. Para él, dijo, la mujer se queda en casa. "¡Soy yo quien va a trabajar!"
Aquí irrumpe el primer discurso flamígero de Yosra. Ella, cuya madre, en un entorno totalmente patriarcal, se ocupa de la familia como única responsable de proveer el sustento para ella y sus hijos. "¡Con nosotros, es mi mamá la que trabaja para que mis hermanas y yo podamos ir a la escuela!", grita Yosra y rápidamente divide a sus compañeras y compañeros en dos grupos: en una fila las niñas y los niños que abogan por la independencia económica de las mujeres, en la otra los que se oponen.
Había más opositores que partidarios. Sin embargo, la experiencia en el patio de la escuela la marcó para el resto de su vida. A partir de entonces, defenderá con determinación el derecho de las mujeres al trabajo. En la adolescencia, su decisión de luchar por la igualdad de derechos se refuerza; su decisión final se toma el día en que promete a su madre Assya que se convertirá en abogada y se unirá a la Association Tunisienne des Femmes Démocrates (ATFD) como activista.
Tras terminar el bachillerato, se matricula en la Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales (FSJPST) de la Universidad de Túnez y acaba ingresando en la ATFD. Es licenciada en Derecho Empresarial y en Derecho. El tema de su tesis final es el matrimonio en el derecho tunecino, en el ámbito de la tensión entre "contrato e institución". En medio de una sociedad conservadora, Yosra se atreve a abogar por el reconocimiento de las parejas no casadas y las familias monoparentales y por su igualdad jurídica con las parejas casadas.
La igualdad: Ha llegado el momento
Durante sus estudios, adquiere sus convicciones políticas de izquierda, se involucra en la red sindical estudiantil y se convierte en miembro activo de la organización juvenil ATFD. Allí se interesa especialmente por el comité de lucha contra la violencia, donde trabaja por la ayuda solidaria y el asesoramiento a las mujeres víctimas de la violencia doméstica.
Este servicio de activistas de la ATFD ofrece apoyo psicológico y jurídico a las mujeres afectadas por la violencia. En 2018, se pone al frente de la ATFD y asume la presidencia hasta junio de 2021, cuando pasa el testigo a una nueva junta.
Tras la caída de Ben Ali, participa en el proceso de transición democrática de diversas maneras y pone su experiencia al servicio de la Alta Autoridad para alcanzar los objetivos de la revolución. Con ello, aprovecha una nueva oportunidad para denunciar agravios y desigualdades en materia de derechos humanos y abogar por "la plena igualdad entre hombres y mujeres".
Para Yosra, la igualdad no es sólo una causa con la que está comprometida desde temprana edad, sino también un concepto integral, una visión, un objetivo y una consigna de acción: conditio sine qua non para el bienestar de cualquier sociedad.
En 2017, participa en la aprobación, incluso en la redacción, de la primera ley integral de Túnez contra todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas. Una ley que fue duramente criticada por los islamistas que estaban en el poder en ese momento y representaban una mayoría en el parlamento.
Está orgullosa de este logro y no lo oculta. Es una ley por la que sigue luchando para su aplicación concreta en todo el país. Se trata de una ley que, entre otras cosas, permite a la hermana menor de Yosra, la veterana activista de ATFD y cooperante de Beity, Wafa Frawes, emprender acciones legales contra la violación de los derechos de las mujeres en las redes sociales. Wafa es una de las primeras mujeres tunecinas en presentar cargos contra uno de sus seguidores – un hombre que está llevando a cabo una campaña de desprestigio contra ella en Facebook.
Feminismo: Tomar el frente juntos
También fue Yosra Frawes quien concienció de que la lucha del feminismo y la lucha por los derechos LGBTQ++ en Túnez van juntas. En noviembre de 2019, es atacada porque se manifestó al lado de activistas LGBTQ++. Esto no le impide seguir apoyando la lucha por los derechos LGBTQ++. En una entrevista de finales de diciembre de 2019, lo explica así: "Nos unimos sobre todo porque nos referimos juntos a los derechos humanos indivisibles, pero también porque hacemos las mismas reivindicaciones: ¡Eliminar las desigualdades y levantar la discriminación legal! Y, por último, porque nuestros encuentros nos fortalecen en nuestras luchas, que consideramos inseperables".
Además de la FIDH, en 2017 está reclutando a otras organizaciones para preparar el informe de los grupos de interés de la sociedad civil que se presentará al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU) como parte de su Mecanismo de Examen Universal sobre Túnez.
Desde 2012, participa en la consecución de la liberación de Jabeur Mejri, condenado a siete años y medio de prisión por publicar caricaturas supuestamente blasfemas en Facebook. No descansa hasta que él puede abandonar Túnez y continuar su carrera artística en un exilio seguro.
Para terminar:
Tras el fin de su mandato como presidenta de la ATFD, Yosra Frawes se ha reincorporado al círculo de activistas de todas las edades que actúan en las regiones y municipios y cuya alegría comparte al encontrarse con mujeres emancipadas una y otra vez y cada vez más a menudo.
Sigue trabajando en privado, profesionalmente y en público por la igualdad real en la vida cotidiana de las mujeres. Actualmente dirige un proyecto sobre la igualdad en el derecho de herencia en los Estados del Magreb (Túnez, Marruecos y Argelia). Una lucha audaz en las sociedades de estos tres países, donde la transferencia de acciones de propiedad ha estado regulada hasta ahora por leyes discriminatorias basadas en la religión, la tradición y la sharia. Para Yosra Frawes, la autodeterminación de las mujeres es ante todo una cuestión de igualdad de acceso a los recursos económicos.